Pau D'arco

El nombre del árbol “pau d’arco” en portugués significa “árbol de arco”. La corteza y la madera de pau d’arco podrían prevenir el crecimiento de células cancerosas y retardar el crecimiento de tumores.

El árbol de Pau D ́ Arco, o Palo de Arco, también conocido como Lapacho, crece en la selva del Brasil. A diferencia de otros árboles de la zona, el Pau D ́ Arco no desarrolla hongos, aún cuando crece en la espesura de la selva tropical más húmeda del mundo. El Pau D ́ Arco contiene un químico llamado lapacol, del cual puede derivarse su uso tradicional para apoyar y fortalecer el sistema inmunológico. Los naflaquinones y los taninos le confieren su acción antifungal. El Palo de Arco ayuda a atacar infecciones posteriores a tratamientos antibióticos, restaurando y fortaleciendo toda la estructura a nivel celular en el cuerpo humano.

Los incas y nativos de Sudamérica usan la corteza externamente para enfermedades de la piel como eczema, psoriasis, infecciones de hongos, hemorroides y cáncer en la piel, por los compuestos que contiene, ya que presenta una actividad en contra de los tumores, especialmente en ciertos casos de cáncer en la sangre y de la piel.

La corteza interna del Palo de Arco es rica en lapachol, un compuesto inmuno-estimulante que tiene propiedades antibióticas y antitumorales. Lapachol impide el crecimiento del tumor mediante la inhibición del metabolismo del oxígeno por las células tumorales. Investigaciones recientes muestran que el lapachol es activo contra la leucemia linfocítica.

Los investigadores del Instituto de Investigación Médica Naval en Bethesda (Maryland) también encontraron que lapachol muestra una acción protectora frente a la penetración e infección de un parásito mortal conocida como Schistosoma mansoni, que puede ser transmitida a los seres humanos a través del contacto con agua dulce contaminada con heces humanas.